La Silla Japón: Un Monumento Arquitectónico en tu Sala de Estar

Jan Goderis transforma la arquitectura tradicional japonesa en un diseño de silla minimalista y funcional

La inspiración para la silla Japón proviene de la arquitectura tradicional japonesa. La colección Japón, a la que pertenece esta silla, se caracteriza por su sofisticado juego de proporciones y su estructura metálica, que se combina con madera y cuero. Los colores de la madera, el cuero y el metal pueden ser personalizados, lo que permite que la colección se integre perfectamente en diversos interiores. Aunque la colección funciona como un punto de descanso, también está diseñada para irradiar una monumentalidad arquitectónica.

La silla Japón se distingue por su enfoque en la sostenibilidad y la comodidad. Con un marco de metal combinado con madera y cuero, se logra la máxima funcionalidad con un mínimo de materiales. Los materiales de calidad garantizan que la silla pueda ser utilizada durante décadas. Además, se han utilizado productos y materiales ecológicos para su producción, como barniz ecológico y cuero curtido con resina de madera.

La silla se fabrica con materiales básicos como acero, madera y cuero, lo que facilita su producción. A pesar de su simplicidad, se utiliza tecnología nueva para su producción, como una máquina de carpintería CNC de 5 ejes para las patas y una máquina láser CNC para el marco de acero.

La silla Japón tiene una forma básica que permite que los materiales y acabados se adapten a los deseos del usuario y se integren en cualquier entorno. La forma básica se ha desarrollado a partir de una forma de asiento ergonómica y cómoda ideal. Con un asiento de cuero, el cuero se moldea a la forma del cuerpo. Cuando el asiento y el respaldo se hacen de plástico, la forma sigue los contornos del cuerpo para una forma de asiento ideal.

El diseño de la silla Japón se desarrolló a principios de 2020 y el prototipo estuvo listo a finales de 2020 en Gante, Bélgica. Ahora se busca una empresa nacional o internacional para la producción. Durante el diseño, se realizó una investigación para encontrar una forma de asiento ideal y ergonómica. Se midieron modelos de sillas existentes y se hicieron modelos a tamaño real para probar y ajustar la forma del asiento. Este proceso de diseño permitió diseñar la silla hasta su esencia, con un método de producción simple, social y económicamente relevante, y teniendo en cuenta el aspecto ecológico.

El mayor desafío fue desarrollar un diseño básico de silla con un mínimo de material y construcción, y aún así diseñar una silla estética que no sólo sea hermosa, sino también cómoda para sentarse y usar. En la evolución del diseño, el objetivo principal fue reducir las cosas a un mínimo. El diseño se redujo literalmente a lo esencial.

La silla Japón de Jan Goderis es un ejemplo perfecto de cómo el diseño puede ser a la vez minimalista y funcional, y cómo la inspiración puede provenir de las formas más inesperadas. Con su enfoque en la sostenibilidad y la comodidad, esta silla no sólo es un objeto de diseño, sino también un objeto de uso diario que puede durar décadas.